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La psicoterapia le puede ayudar. Imperfectos y felices ¡Es posible!
Quizá esta no sea la carta más amable del mundo, pero si es bastante sincera…
Yo lo tenía todo, de verdad, absolutamente todo, pero no me daba cuenta; yo era de buena familia , pero no hablo de dinero, no, hablo de personas buenas, de esas capaces de cualquier cosa por ver felices a los suyos; además tenía algunos buenos amigos, y otros que resultaron no serlo tanto, pero aún así, no estaba sola. Y lo más importante, tenía salud y los que me rodeaban también.
Además, había podido estudiar lo que quería, mientras trabajaba en lo que me gustaba, me esforzaba mucho, quizá demasiado, pero es cierto que poco a poco iba consiguiendo mis objetivos (o eso creía yo).
Empecé a obsesionarme por conseguir lo que creía era “la vida perfecta”, hasta que me dí cuenta de que cuanto más avanzaba menos feliz era, y llegaron los problemas…Empecé a tener problemas para dormir, para comer, no me divertía con nada,no consegía disfrutar de las fiestas o eventos igual que el resto, me obsesioné sin querer con mostrarme perfecta, como amiga, como hija, como alumna, como compañera de trabajo, como vecina, …. vivía haciendo “lo correcto” siempre.
Parece una tontería, pero hasta que acudí a las sesiones de psicoterapia, no encontraba la felicidad porque la buscaba en el lugar equivocado. Había pasado tanto tiempo haciendo lo que los demás esperaban de mí, que se me había olvidado quién era yo; hasta el punto de que si algo me hacía daño, o no me gustaba, me callaba, lo perrmitía porque “era lo que tenía que hacer” para no ofender o enfadar a otros.
Pues bien, ha sido un trabajo muy intenso emocionalmente, pues aprender a cerrar puertas, y a decir que no, en un principio fue muy duro, pero ahora me siento fuerte, más “grande”, con más energía, y aunque tengo mis momentos de flaqueza, sé que nunca más volveré a ser la de antes. He encontrado mi verdadera personalidad y la dejo “salir” a pasear cada vez que quiere (esta frase se la digo a mi psicoterapeuta cada vez que me siento orgullosa de mí misma jejej).
He aprendido que no pasa nada por equivocarse, que si algo no me gusta tengo que decirlo, que no por dar nuestra opinión faltamos el respeto a nadie, y que si alguien te quiere se mantendrá a tu lado seas como seas y hagas lo que hagas.
Pienso como era mi vida hace un par de años y puedo decir que hoy,mi vida es completamente distinta, distinta y plena.
Gracias!!